Fui asesor de panoramas para una empresa que diseñaba sueños. Fui ascensor en un edificio cerrado por derribo. Y también asesiné dos asesores por un ascenso.
Fui vendedor de vendas, loco de atar, enano de jardín. Fui Kleant Eastwood en una película en blanco y negro. Fui negro en una película a color…y fui de color en una película en negro.
Fui tutor en una escuela de tute, mascarito en Egaña, embajador en un cuesta arriba, asaltante en Salto, salteador de comidas, vendedor de asteriscos y cabezudo en una comparsa.
Fui arqueólogo, arquitecto y arquero. Fui polilla en un foco de mercurio en calle Carmen. Fui gnóstico, agnóstico y gnomo. Fui y vine, y no encontré nada.
Hice un curso para fabricar artesanías con salame vencido y otro para soplar y hacer botellas. También he sido parte de una conspiración para detener la expansión del Universo, pero fue descubierta y entonces fui refugiado en Polonia por un tiempo y después me fui a vivir a Palo Solo, donde me dediqué a la medicina alternativa, es decir reparaba alternadores de tractor.
Tampoco quiero dejar de lado que ejercí algún tiempo de masoquista, de maniqueo, de maniático maniatado, de maní tostado, en fin: vistas todas estas condiciones expuestas me considero la persona más adecuada para el puesto pero puesto que no sé de qué puesto se trata, voy con lo puesto y dispuesto a trabajar, por supuesto.
